Villa de Ahome., (Global Medios).- El tizón foliar del maíz es una enfermedad que no se debe desestimar en el Valle del Fuerte, pues su ataque a materiales susceptibles ya es más agresivo obligando a los productores a realizar 3, 4 y hasta 5 aplicaciones para contener su avance encareciendo el costo del cultivo.
En un recorrido de fin de semana por esta zona se observó daños hasta en un 30% de la planta en uno de los híbridos de la empresa PIONNER y 5% en un híbrido de Novasem, que el ciclo pasado no tenía problemas, por lo que se teme que el hongo se pueda salir de control.