Agentina (GLOBAL MEDIOS).- Desde la Argentina, antes de mudarse a México hace casi 20 años el ingeniero Elvio Botana lanzó un llamado de auxilio pidiendo hacer algo para frenar la descertificación de sus tierra provocada por los «Agro Nazis» como él llamaba a los grandes productores que siembran miles de hectáreas donde utilizan semillas de soja transgénicas y aplican cantidades industriales de Agro químicos.
El investigador que falleció aquí en México en condiciones precarias formaba parte de un grupo de productores orgánicos a quienes brindaba asesoría, buscando producir alimentos sanos.
Narra como es que de niño les alimentaban con leche de soja que se producía en la Argentina, pero desde que llegó Monsanto con sus semillas de soja resistentes a glifosato e invadió toda la tierra cultivable, no hubo producción libre de residuos tóxicos.
Destaca que la transaccional encontró la puerta abierta para entrar a la Argentina porque el ministro de Agricultura es un ex director de Monsanto y ahora tienen que importar la soja de Brasil y Estados Unidos para darle valor agregado a sus cosechas, «pero lo que están haciendo con los niños es un genocidio», recalca.
Luego expresa su preocupación por la descertificación de los suelos agrícolas de su país y exclama «hagamos algo para frenar esto, hay que parar a los Agro Nazis, si no qué fregados les vamos a dejar a nuestros hijos